miércoles, 16 de noviembre de 2016

Tu beneplácito











  Una idea o un lapsus, algo de lo que hablar o algo que omitir, quiero contar una historia o quizás escribir un poema.

  Dos líneas, tres borrones, cuatro palabras, tres tachones, un borrador encogido y arrojado a la papelera.

  Musas que vuelan sin dejarse cazar, para ser plasmadas en un papel.

  Memoria que llega tarde, fragmentada en trozos que arrugan los recuerdos.

  Café, horas de desvelo, madrugadas sin cuartel y cuando por fin creo que he acabado algo, cuando pienso que puede haber palabras que transmitan sentimientos o ideas, no me siento satisfecho, tal vez frustrado.

  Ni yo mismo me entiendo.

  De todos modos me da igual, nunca creo haber acabado nada. Tú sabes, que sólo tengo una forma de averiguar que he acabado un relato, que he escrito un poema, que ya está listo para lanzarlo al aire.

  Comienzas a leerlo, tu voz vibra de emoción, haces pausas interminables, analizas cada frase, ahíncas en las palabras que te calan. Es entonces y solo entonces, cuando tú has acabado de leerlo, cuando yo sé que está acabado, es el momento en el que el poema merece la pena.

  Tú eres el visto bueno, para que a mis obras le crezcan alas y echen a volar. Ahí quedo tranquilo, es en ese final cuando suelto el papel y lápiz, dejando descansar a mi corazón emocionado.

  Me miras, me apremias y yo sonrió.




Nadavepo.



6 comentarios:

  1. No importa el tiempo ni la distancia porque por cada una de tus palabras vale la pena esperar. Recuerda que en tus manos posees la magia que hace realidad un sueño y el mío es leerte. Precioso como siempre mi querido Alejandro, muakkk.

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  2. Magia es saberse rodeado por seres humanos como tú, personas que hacen crecer como si fuese un eco, las palabras que leen y con las que agradecen un humilde escrito. Gracias de todo corazón querida Marta. Muakkk

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  3. Las musas no se fugan, ni emigran, ni huyen de ti, de tu sensibilidad, de como acaricias y besas cada verso. Sólo se retiran a descansar de tu impetú, de tu vehemencia, de tu pasión.
    Y es el beneplácito de quien lee quien vuelve a despertar las hadas de la palabra para que cinceles la mejor y mayor escultura posible.
    Siempre tendrás mi beneplácito a tus bellas palabras y mejores emociones Alejandro.

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  4. Tus palabras son en si un poema, alimentan mi alma y dan paso a una nueva creación. Tu sensibilidad va más allá de cualquiera de mis escritos, leerte es un deleite. Gracias querida Dolors. Muakk

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  5. Bellas palabras , las que hoy nos dejas ,cierto es que a veces lo que escribimos no, nos gusta y nuestro amigo en ese momento es la papelera , esa que esconde los pequeños fracasos que escribimos , pero que una vez superados , nos salen los mejores escritos , sean sentimientos , sensaciones o emociones ... y aún así , necesitamos que alguien nos de su aprobado , pero aunque así fuera , nunca olvides que el beneplácito siempre lo tienes tú.Un saludo y recuerda escribir no solo te alimenta el alma a ti , sino a los que te leemos .

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    1. No se como agradecerte tus palabras, eres una de las primeras lectoras que tuve, por eso te profeso todo mi respeto y un cariño inconmensurable. Permiteme mandarte un beso, muakkk

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Brisa