viernes, 27 de mayo de 2022

Desamor

 


  Quien no tuvo alguna vez… la mala fortuna de encontrarse con la persona equivocada y que esta la arrastrara a una profunda pena de amor, y que al final de esos días de siniestra  oscuridad encontrara un rayito de sol.

  Nunca perdamos la esperanza de encontrar algo mejor.




Alejandro Maginot



miércoles, 25 de mayo de 2022

El Cruce

 


  Hay muchos cruces en la vida, cruces de caminos, cruces de vías, etc.

  Pero sólo hay un cruce que para algunos es crucial… y es un cruce de miradas, si alguna vez has estado en ese cruce y te has quedado anclado en él entenderás de lo que hablo.




   Alejandro Maginot



viernes, 20 de mayo de 2022

Mis labores

 

  Aprendí a realizar mis labores desde pequeño pues ya se encargó mi madre de ello. Ahora que ya soy mayor lo sigo haciendo porque no hay nada más bonito que un hombre con su mandil puesto.

  Espero que os guste esta lección cargada de mucho humor.




Alejandro Maginot  



martes, 17 de mayo de 2022

La amistad

 

      ¿Qué es un regalo, sin una amiga que lo acepte?

      ¿Qué es una amiga sin un corazón que ofrecerle?

      ¡Por la amistad da igual en el género que se presente!




        Alejandro Maginot



domingo, 15 de mayo de 2022

Experiencias

 

  Este pequeña historia nos muestra algunos complejos de la niñez, también refleja pequeñas pinceladas de una vida cotidiana y lo que es más importante la exploración en el sexo, sensaciones que no entendemos cuando somos pequeños, pero que son de lo más placenteras.

  Y aunque cuento momentos de la infancia que pudieran ser tristes, no quiero abordaros con ellos, así que aquí os dejo una especie de cuento medio en broma medio en serio.

  Sobre todo lo que se trata es de reír y si lo consigo con este vídeo, afortunado quedo.   




             Alejandro Maginot.


lunes, 9 de mayo de 2022

Mi Dama... Mi Señora

 

 

  Ya casi sin aliento por no poder verla, dado al castigo que ambos teníamos impuesto por viejas disputas entre nuestros respectivos linajes. No pude evitar aquella misma noche y tras el regreso de una dura batalla, plantarme bajo la torre donde se encontraban sus aposentos… y entre suspiros y lamentos lance estas palabras al viento.




  ¡Oh! Como te odio impertérrita hiedra, que con tus miles de tentáculos escalas las murallas sigilosa y en silencio llegando al balcón de mi amada, teniendo el privilegio de contemplar su pura y delicada belleza.

  Mientras yo ni tan siquiera tengo alas para poder desafiar a la gravedad y volar hasta sus aposentos, para abrazarla y desteñirla a besos. Quiero echarle un pulso entre sus sabanas nacaradas y tener por testigo sólo la luna plateada.

  Pero ya ves mi Dama el creador me ha negado esas alas, por lo que no tengo más remedio… que conformarme con verte asomarte a tomar el fresco de la madrugada, quedando absorto mientras observo cual luciérnaga mágica como las estrellas iluminan tu cara.

  No puedo ni gritarte para explicarte mi rabia ni tan siquiera pronunciar tu nombre para calmar mi alma.

  Y yo te pregunto roció de la noche, ¿Cuándo oirá mis suplicas, cuando mis proclamas?




         

                 Alejandro Maginot.



martes, 3 de mayo de 2022

La última batalla

 

  Aquí os dejo una breve historia…

 Que nos demuestra que la desesperanza puedes utilizarla a tu favor, para conseguir tus objetivos.




Alejandro Maginot


Brisa