Alejandro
Maginot
Quiero revivir el espíritu de la navidad con un pequeño
cuento, que aunque fantástico es muy real.
¡Feliz Navidad!
Alejandro Maginot
Andar a esa edad en un mundo tan cruel, es
como pasear por el filo de una navaja.
Aunque si tienes un buen Ángel de la guarda,
seguro que te alejara de las malas compañías… y permitirá que crezcas como una buena persona.
Alejandro
Maginot.
Cual bien me hizo entrar de lleno en un
binomio perfecto, donde mi salud mental entro en el más sano de los trayectos…
de mi convulsa vida.
Aplacar todos los malos pensamientos y ser el
hombre más humano en los sentimientos cotidianos, donde a veces nos refugiamos
para reír o llorar.
Viva la complicidad sin ápice de vergüenza,
para rozar la lujuria más perversa y auxiliadora que jamás viví.
Hacemos matemáticas aplicadas, aunque en el
sexo sean matemáticas desmadejadas que rompan con todas la normas establecidas.
Quiero
volver atrás en el tiempo y volver a comenzar de nuevo, deseo que brille el sol,
como brillaba en los amaneceres cuando tus cabellos alumbró.
Anhelo un atardecer tan mágico como los que
tuvimos en el ayer… añoro oír tus pasos y que me sorprendas besando mis labios.
Quiero cambiar el mundo para estar a tu lado…
y si no lo puedo conseguir que el mundo me cambie a mí volviéndome loco, así no
recordaré que estuve vivo alguna vez.
Alejandro Maginot.
Cuantas veces se puede perder la fe en el
transcurso de la vida. Yo creo que muchas y por distintas circunstancias, pero
es la del desamor la que gana por goleada.
En esta aventura me lleve el más grande de los
desengaños, sospeche que ella pudiera estar enamorada… ¡y lo estaba!
Pero me hubiera dolido menos, si me pudiera
haber batido en duelo con un elegante caballero.
Alejandro
Maginot.
“No soy humano”, es una metáfora de la
fortaleza que adquirimos las personas en momentos delicados de nuestras vidas.
Quiero con este vídeo mandar un mensaje de
esperanza a todos aquellos que aunque lo estén pasando mal, saben que remontarán
y su camino felizmente seguirán.
Dedicado a las personas que queremos y a las
cuales animamos, deseándole que salgan pronto del hospital.
Alejandro
Maginot.
Sueños… quien podría vivir sin ellos, quien diría
que no ha viajado a donde quiso, quien juraría que no vio a un ser querido que
ya se había ido, quien me diría que hasta el ser más malvado los quiso.
Sueños vivos, sueños rotos, sueños que amueblaron
la cabeza del más tonto… sueños por ti, sueños por todos.
Alejandro Maginot
Dicen que una mirada lo dice todo... espero que
estas imágenes acompañadas de una bella canción que nos habla de las miradas, os
haga encontrar esa mirada que lo dice todo.
Alejandro
Maginot
Nacer es un privilegio allá donde se nazca , da igual el clima que haga, la vegetación que por allí abunde, el tipo de animales que encuentres a tu alrededor. Y lo más importante es ser y sentirte humano… da igual cual sea el color de tu piel.
Alejandro
Maginot
Se pueden hacer fabulosos viajes, pero ninguno fue comparable al maravilloso viaje que hice por las maravillas del antiguo y del nuevo mundo.
Alejandro
Maginot
Siempre busco
sombra, incluso en invierno también… la necesito siempre, pues tu sombra es cálida
en invierno y refrescante en verano.
Alejandro Maginot
En este vídeo sólo he querido dejar una buena música aderezada con bellas imágenes para vuestro deleite… creo que en este sobraban las palabras.
Alejandro
Maginot
Vive desde el minuto uno y hasta el final de
la cola del cometa del amor, los momentos más inolvidables que a años luz
puedas recordar.
Disfruta y haz disfrutar.
Alejandro
Maginot.
Aquí os dejo mi presentación audiovisual de mi
novela antes llamada “Alastair… y el fallido experimento en Aberdeen” que ahora
en la segunda edición ha pasado a llamarse “Lady Lioslaith y el enigmático club”.
Espero que os resulte de vuestro agrado y pueda entreteneros en esos ratitos de
playa.
Ya a la venta en Amazon.
Alejandro Maginot.
¿Quién no estuvo alguna vez loco?... por unas
vacaciones, por tener un coche, por poseer joyas, incluso por amor. Pero quien
estuvo loco además de por amor, por hacer el bien y ayudar a los desfavorecidos
aunque le fuese en ello la vida, me uno a estos últimos para sentirme bien con
mi corazón.
Alejandro
Maginot
Quien no tuvo alguna vez… la mala fortuna de encontrarse con la persona equivocada y que esta la arrastrara a una profunda pena de amor, y que al final de esos días de siniestra oscuridad encontrara un rayito de sol.
Nunca perdamos la esperanza de encontrar algo
mejor.
Alejandro
Maginot
Hay muchos cruces en la vida, cruces de
caminos, cruces de vías, etc.
Pero sólo hay un cruce que para algunos es
crucial… y es un cruce de miradas, si alguna vez has estado en ese cruce y te
has quedado anclado en él entenderás de lo que hablo.
Alejandro
Maginot
Aprendí a realizar mis labores desde pequeño
pues ya se encargó mi madre de ello. Ahora que ya soy mayor lo sigo haciendo
porque no hay nada más bonito que un hombre con su mandil puesto.
Espero que os guste esta lección cargada de
mucho humor.
Alejandro
Maginot
¿Qué es un regalo, sin una amiga que lo
acepte?
¿Qué es una amiga sin un corazón que
ofrecerle?
¡Por la amistad da igual en el género que se
presente!
Alejandro
Maginot
Este pequeña historia nos muestra algunos complejos
de la niñez, también refleja pequeñas pinceladas de una vida cotidiana y lo que
es más importante la exploración en el sexo, sensaciones que no entendemos
cuando somos pequeños, pero que son de lo más placenteras.
Y aunque cuento momentos de la infancia que pudieran
ser tristes, no quiero abordaros con ellos, así que aquí os dejo una especie de
cuento medio en broma medio en serio.
Sobre todo lo que se trata es de reír y si lo
consigo con este vídeo, afortunado quedo.
Alejandro Maginot.
Ya casi sin aliento por no poder verla, dado al castigo que ambos teníamos impuesto por viejas disputas entre nuestros respectivos linajes. No pude evitar aquella misma noche y tras el regreso de una dura batalla, plantarme bajo la torre donde se encontraban sus aposentos… y entre suspiros y lamentos lance estas palabras al viento.
¡Oh!
Como te odio impertérrita hiedra, que con tus miles de tentáculos escalas las
murallas sigilosa y en silencio llegando al balcón de mi amada, teniendo el
privilegio de contemplar su pura y delicada belleza.
Mientras yo ni tan siquiera tengo alas para
poder desafiar a la gravedad y volar hasta sus aposentos, para abrazarla y
desteñirla a besos. Quiero echarle un pulso entre sus sabanas nacaradas y tener
por testigo sólo la luna plateada.
Pero ya ves mi Dama el creador me ha negado
esas alas, por lo que no tengo más remedio… que conformarme con verte asomarte
a tomar el fresco de la madrugada, quedando absorto mientras observo cual
luciérnaga mágica como las estrellas iluminan tu cara.
No puedo ni gritarte para explicarte mi rabia
ni tan siquiera pronunciar tu nombre para calmar mi alma.
Y yo te pregunto roció de la noche, ¿Cuándo oirá mis suplicas, cuando mis proclamas?
Alejandro
Maginot.
Aquí os dejo una breve historia…
Que nos demuestra que la desesperanza puedes
utilizarla a tu favor, para conseguir tus objetivos.
Alejandro
Maginot